DEsarmar la MAkina!

El Cuerpo podría definirse como toda realidad limitada por una superficie, caracterizada por su extensión y perceptible por los sentidos, como conjunto de los sistemas orgánicos que constituyen a un ser. El Cuerpo en sí es materia cuya ausencia y presencia quedan determinadas en un espacio e instante específicos, ciertos cuestionamientos surgen a partir del uso que hago de mi Cuerpo como eje central de las Acciones y Registros generados a partir de las llamadas interAcciones.
En las diferentes etapas de mi trabajo he utilizado la relación Cuerpo/Objeto como síntesis de procesos en los que ocurren encuentros, intervenciones en diferentes espacios, experimentaciones con una serie de materiales que voy explorando desde mi visión personal, la forma en la que puedo interaccionar con objetos con los que me relaciono habitualmente descontextualizándolos y descontextualizándome, personalmente lo considero una forma de Arte/Vida quedando una serie de Registros post-Acción. La connotación estética acerca del simple hecho de Ser me traslada a una situación de inercia y contemplación, acerca del uso del cuerpo en Situaciones propiciadas voluntariamente.
En las ciencias aplicadas la inercia es la propiedad que tienen los cuerpos de permanecer en su estado de reposo, siempre y cuando las fuerzas externas que actúen sobre el sistema se anulen o sean nulas. El movimiento sugiere un cambio continuo de posición, por lo que planteo la permanencia como antítesis de un proceso continuo de movimiento, en el que a través de la delimitación del Espacio y dejando al Cuerpo en estado de Reposo, despojado de todo material (ropa, accesorios, cosas) se establece un espacio en el que reflexiono acerca de la idea del Cuerpo como Objeto artístico, quedando el Espacio delimitado por una superficie traslúcida, el vidrio, siendo la Acción observable para el espectador.